Mensaje en la botella...

...se sentó a mi lado y yo no pensé poder ser tan feliz por solo tenerlo cerca, por momentos fingí no mirarlo, hablaba con otros y me reía, él me miraba como con algo de nostalgia, como esa que siento yo por no poder estar más con él, por no poder llamarle un día para ir al cine y hacer tonterías, para hablar como lo hacíamos antes…
Observé su sonrisa, la memoricé, su voz me la guardé en algún lugar donde solo yo pudiera escucharla cuando sienta que lo extraño, lo hice mío sin que él se diera cuenta…
Y seguía pasando la noche…
Seguían las risas y mi felicidad, seguía la platica y los detalles, seguían también mis ganas de besarle los labios y tomarle las manos…
Me gustan sus manos.
Me gusta su piel tan blanca, su cabello cayendo sobre su cara, sus ojos que le combinan, su voz y la sonrisa que no esconde…
Le escuchaba cuando hablaba y hasta cuando no, le miraba de reojo si alguien mas me distraía, le puse atención a cada comentario suyo aunque no fuera para mi, le dejé un pedazo de mi reparado corazón cuando dijo que nos conocíamos de antes y que yo era aún, parte de su vida...
Llegó la hora de despedirnos y fue lo que menos me gustó…
En la calle, con el frío de la noche y con la luz de la luna , le dije adios, le di un beso en la mejilla y él a cambio me dio un abrazo y me dijo despacito que agradecía haberme topado una vez más… y me sonrió…
Le sonreí también, y no le dije lo que sentía, solo aparté la mirada y me subí al auto…
Esa fue mi gran noche.
Y la quise compartir contigo, que junto a él, me buscaste y encontraste entre los escombros que otro dejó…

...un día yo tambien pondré mi mensaje en la botella y la echaré, de perdis, a la coladera de la avenida...