Conozco cada detalle de su piel, te dices...
Conozco sus secretos, sus sueños, hasta sus infidelidades, te consuelas.
Como llegue aqui? te preguntas mientras caminas sin direccion alguna.
No te importa saber donde estas, sino, saber como permitiste que pasara...
Lo conozco, lo conozco...incluso mejor de lo que me conozco yo.
Sé lo que sueña, lo que siente mientras se deja envolver por las notas de la música que escribe, sé hasta donde quiere llegar, he aprendido cada uno de los gestos de su rostro: su risa fingida, la sincera, su preocupacion, su enojo, su hastío, su desesperación, su alegria, su egocentrismo, su envidia, la excitación, el orgasmo... Cada rostro lo reconozco.
Lo mismo que conozco las caricias que me regala.las que me vende.
No me ha sido dificil, te dices sonriendo, soy una mujer inteligente!
Te detienes en medio de nada.
Te das cuenta de que no sabes cúanto tiempo llevas así.
Yo siempre tuve la razón, afirmas.
Lo hice por que me dolió su engaño, argumentas.
Y piensas en cada colchón sobre el que te acostaste tratando de olvidar sus besos...
Uno a uno llegaron y se fueron.
Los echaste de tu vida sin dar oportunidad de nada más.
y el unico que casi te convencio, te escupio la cara.
Quien sabe cuantas heridas llevas visibles, quien sabe si serán más o menos de las que no se notan.
Piensas en ello.
Recuerdas que un día, el alma te dolía, que no podías ocultar mas lo que sentías, que el dolor te estaba matando y quisiste escapar.
Quisiste mitigar el dolor y recordaste, que alguien te dijo que las heridas fisicas te hacian olvidar cualquier otro dolor y.. empezaste.
Tomaste una navaja que guardabas en el costurero y comenzaste a cortar...
Primero las piernas, despues los brazos.. las manos.. dolía, dolía mucho.
Pero nada podia dolerte mas que el saber qeu te estaban viendo la cara, que los planes que dibujaste, te los hicieron añicos.
Que saber qeu sus melodias nunca fueron inspiradas en ti.
Y pensabas todo aquello mientras la sangre manchaba el agua que caía sobre tu cuerpo, mientras la fuerza se te ecapaba con ella...
Miras tus manos con heridas frescas y otras ya cicatrizadas.
Te preguntas si un día sanaran todas.
Que harás entonces?dejar que alguien más te lastime?
No.
Te mantendrás huyendo.
Por que antes de él es lo que hacías.
No había poder humano que te ayudara a mantenerte en un solo lugar. Nada.
Te sientas en el suelo y sobre el viento comienzas a dibujar notas, de esas que él te enseñó a acomodar.
De esas que sentististe que te acercaban a él.
De las que aprendiste todo con tal de no perderlo...
Y lloras. Lloras sin poder evitarlo y sin querer hacerlo.
Lloras con todas tus fuerzas, a gritos y en silencio...
Agitas las manos en el aire como borrando todo lo que dibujaste.
Quieres olvidarlo, quieres dejarlo atras.
Quieres que te deje de doler... pero no, no puedes echar atras todo lo que hiciste, no puedes borrarlo, ni olvidarlo..
Tú, que con las mismas manos que dibujabas, y con las que aprendiste a escribir música, le pusiste un final a su melodía.
Tú, que con la mas cruel de las decisiones, clavaste su navaja justo sobre su corazón.
Te acuerdas? No piensas en ello...pero te persigue.
Tú lo mataste!
Y tu mente vuelve a aquel día.
Recuerdas cada detalle, cada movimiento, cada nota que le gravaste con la navaja sobre la piel..
No cicatrizaron.
Cómo no cicatrizará jamas tu alma.
Lo sabes, te lo repites, lo recitas mientras con los dedos, comienzas a dibujar de nuevo aquellas notas sobre el piso...
1 comentario:
me encanta. felicidades.
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