pasó por mi como a eso de las ocho de la mañana. tenía que hacer un recorrido largo y no quería ir solo.
me subí a su maldito chevy azul y me dio un beso.
me puse el cinturón y empezamos la travesía.
le acaban de robar el estereo así que no nos quedo de otra que ponernos a platicar.
yo le iba haciendo miles de preguntas, lo hacía reir y me miraba de reojo.
pero las preguntas se le acaban a cualquiera en medio del trafico en tlalpan.
así que bueno, le tocó a él tambien contarme historias y hacerme reir.
criticabamos a unas mujeres que cantaban en el coche de a lado las canciones de luis miguel de cuando tenía (él) como doce años.
pasamos el centro de la ciudad, se le atravesó un coche y ya mero chocamos con él. se asomó y empezó a gritarle de cosas al sujeto.
eso no fue lo que me asustó (ni el hecho de que aún estuviera borracho), no, eso fue lo mas normal del recorrido.
el susto vino cuando nos pasamos de la calle en la que tenía que darse vuelta y se puso a gritar como maniatico: pendejo, soy un pendejo, que no ves?????? (imaginese acompalado de unos cuantos azotones sobre el volante)
bueno, me hice la disimulada (si eso puede siquiera pensarse) y seguimos.
como el niño venía aún en el proceso de la borrachera y la cruda, pues como que se quería quedar dormido, así qeu yo me encargaba de mantenerlo despierto. o al menos lo intentaba.
en una de esas, no se fijo y por poco terminamos chocados contra un arbol del camellón en no sé que calle.
del puro coraje, se soltó una cachetada que hasta a mi me dolió namas de ver como le quedó la mejilla...
ok. eso es parte de lo que puedo soportar. no es la primera vez que debo soportar arranques de ese estilo.
lo peor llegó cuando, ya casi a las tres de la tarde, sin desayunar y cerca de casa, empezamos a hablar de musica.
hablabamos de que cuando yo estudiaba la secundaria, mis amigos me influenciaron para que me gustara la musica grupera, despues, me latió mas el pop y así fui cambiando...
luego él me dijo que le latian los tigres del norte, pero despues se había vuelto fan de corazón del hip hop...
y entonces, (maldito entonces!) dijo:
puedo hacerte una confesión?
obvio, dije que si.
y lo dijo, maldición, lo dijo!!!
dijo, con todas sus letras y sin pena alguna:
me gusta jeans!!!!!
Dios lo ayude.
5 comentarios:
Si, eso es cierto mi querida Max, conociendo a la gente es la mejor forma de desilucionarse de ellos.
Claro, con sus respectivas excepciones ;)
Quizá sea bueno que no le de pena, yo me subí al coche de un ex y en cuanto empezó a cantar Luis Mi cambió de disco, no se si fue por la manera en que lo miré o por que realmente le daba pena, pero bueno, a veces la gente cambia.
Pensé que el tipo estaba medio loco, pero no, sólo estaba pedo-crudo, el ser humano suele ser estúpido con éste síntoma.
dios no lo debe ayudar, debe fuliminarlo con un rayo inmediatamente, claro, permitiendo que tu pongas unos buenos kilometros de distancia..
Al menos no dijo RBD, en gustos se rompen generos, pensemos que es parte de su evolución.
Publicar un comentario