Son las once cincuenta pe eme…
Acabo de llegar del cine en el cual, por cierto, me topé con un montón de coincidencias…
Una entretenida mezcla de mentiras, oportunidades y amor a sí mismo…
Ya acá, me encuentro de frente con mi realidad, con ésta que me golpea la cabeza a cada minuto…
Y otra vez repito la historia…
Volví a enredarme entre mentiras y, de nuevo, no sé como escapar…
Ahora que? Como lo enfrento? Como le digo que todo fue una trampa en la que nunca creí que cayera…
Mierda!
Una vez más no sé que hacer…
No tengo un argumento válido, una razón que me justifique, un algo que le diga que fue el único camino que encontré…
Que solo oculta tras una máscara, tras un nombre, tras una dirección, pude acercarme, pude entrar en su vida, saber de él, conocerlo…
Carajo!
Que le digo?
No la verdad…
Sería caer a lo mismo, tirarme al vacío, bajar el juego… otra vez rendirme antes de acabar…
No sé por que me quejo si sabía que esto pasaría, lo supe desde que todo comenzó…
Y quien le diría que lo que está buscando lo tiene frente a él, quien iba a decirle que se ha topado un montón de veces con el rostro que solo imagina, que ha escuchado los silencios de frente de aquella voz que solo conoce al teléfono…
Como voy a explicarle que soy todo lo que no busca, lo que para nada le hace falta, lo que no quiere en su vida?
Huiré…
Así, sin más, sin una explicación, sin más palabras, sin las lágrimas que sellaron la otra historia…
Solo así, lo dejaré que me odie si quiere, que aborrezca un rostro desconocido, que borre mi teléfono de su agenda, que es lo único mío que tiene, además de mis palabras…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario